Poder acceder a la donación, implica realizar un movimiento que permita enlazar las ideas a representaciones positivas, de vida:
Respetar la voluntad del fallecido (expresada verbalmente o por cédula de donación).
Haber pasado por situaciones que sensibilizan sobre el tema (Pérdidas anteriores, conocer a alguien en lista de espera).
Identificarse y sensibilizarse con la necesidad y el dolor ajenos. (Este fenómeno se viene observando en alto porcentaje de donaciones en operativos pediátricos).
Tener la fantasía de algún tipo de “Sobrevida” del ser querido en el potencial receptor. (Estas creencias no se discuten si ello es lo que permite acceder a la donación, pero no las reforzamos ni las alentamos, dado que científicamente no son ciertas).
Poder hablar de la donación, brinda un sentimiento de consuelo y reparación ante una pérdida brusca y afectivamente dolorosa.
1 comentario:
Es un tema muy delicado...uno tiene muchos prejuicios...admiro tu "campaña". Ya sé que es una ficción pero no sé si viste la película "Dos vidas contigo" Trata sobre este tema a través de una historia romántica, que toca propiamente el corazón...
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